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Presentación Temporada 2007/08

Tras un ciclo de siete temporadas, iniciado en la segunda territorial andaluza (la más baja del waterpolo nacional) el Club Waterpolo Sevilla llega a la máxima categoría, la División de Honor. Algo inusitado que costará trabajo repetir en las mismas condiciones y que no ocurría desde hace cincuenta años.
El sorprendente ascenso tras alcanzar el subcampeonato de la Primera División y la renuncia del Waterpolo Valencia no dejó indiferentes a los aficionados al waterpolo en Sevilla.
La máxima aspiración de cualquier deportista se ve así cumplida tras años de esfuerzo y sacrificio, donde el trabajo de cantera y el apoyo de la afición han llevado a aquellos jugadores que entrenaban en el 2000 en la Plaza de España por falta de instalaciones, a codearse con lo mejor del waterpolo nacional e internacional.
Porque el waterpolo en Sevilla se convierte, especialmente para los más jóvenes, en un ejemplo de lo que se puede conseguir con trabajo y ganas de superar dificultades. Todo en el Club Waterpolo Sevilla es diferente a los once restantes de la División de Honor, comenzando por los jugadores que lo componen, ya que el waterpolo es un hobby, una pasión, pero no viven de ello. Son estudiantes o trabajadores que van a enfrentarse a equipos formados por profesionales elegidos en el mercado nacional e internacional, convirtiéndose así en el único conjunto no profesional de la categoría.
Los estudiantes tendrán que solventar sus clases en la universidad o en los institutos de secundaria para intensificar los entrenamientos (en horas de clases generalmente) y los trabajadores deberán dosificar su esfuerzo para compaginar su medio de vida con la pasión de jugar al waterpolo. En uno y otro caso perderán algo más que dinero y asignaturas. Todo por practicar deporte al más alto nivel, aunque sea solo por un año.
Jóvenes jugadores (siete quedan aun de aquellos pioneros) que ven colmados sus sueños tras un recorrido completamente amateur, y en el que han visto cómo en su tercera temporada en la segunda Categoría Nacional (Primera División) el subcampeonato les permitió cobrar la tan ansiada plaza, superando en el camino a conjuntos semiprofesionales.
Y más especialmente cuando el año 2007 ha sido también el de la eclosión internacional de los jugadores sevillanos. A la presencia del capitán Lastres con la selección española absoluta, se unieron los universitarios Javier Asencio y Andrés Rosa en la reciente Universiada de Bangkok, y el juvenil Álvaro Millán y el cadete Eduardo Alcaraz con las correspondientes a sus categorías.
Desde el 6 de octubre de 2007 al 5 de abril de 2008 tendrán la oportunidad de encarar 22 encuentros con históricos como Atlétic Barceloneta, y los Natación Tarrasa o Natación Barcelona, y demás clubes centenarios que hacen del waterpolo un espectáculo digno de los mejores aficionados. Por ello, echarse a la pileta del vigente Campeón de liga Atlétic Barceloneta el próximo 6 de octubre en el primer partido será el culmen de muchas aspiraciones. Para los aficionados, el 13 de octubre de 2007 será la vuelta a Sevilla del mejor waterpolo tras muchos años de ausencia.
Las dificultades se solventarán con mayor esfuerzo, dedicación y entrenamiento si cabe, así como la fuerza mental necesaria para abordar una temporada que presumen dura. Por su parte, los refuerzos llegan de la propia cantera, como es tradicional en este club. A la plantilla se incorporan los juveniles y cadetes que tan buenos resultados están mostrado en el filial de la Tercera División. No hay bajas respecto al curso pasado porque nadie perderse participar en la Divsión de Honor.
En el plano económico, lo apremiante del calendario en el que se confirmó la presencia en División de Honor y el hecho de no encontrar patrocinadores y colaboradores, hacen que económicamente esta temporada haya que realizarse con las mismas o quizás mayores dificultades que las anteriores. Los compromisos aun no se consolidan y, con seguridad, tocará escasez y apretarse aun más el cinturón. Ahora le toca vivir al Club Waterpolo Sevilla la historia ya conocida del deporte minoritario en esata ciudad, para el que los éxitos deportivos no se traducen en el necesario apoyo económico. En otras latitudes no muy lejanas este problema estaría ya resuelto con creces.
En el plano técnico tampoco hay cambios. Jesús “Tano” Ordóñez ha guiado este ciclo de siete años y continuará una temporada más como máximo responsable del equipo. Como asistente, el técnico José Luis García, responsable del filial la pasada temporada con el que alcanzó la tercera plaza en la Tercera División –Andalucía- y el Subcampeonato de Copa Andaluza.
Pero sí hay un cambio. Será la instalación. Los de San Pablo se marchan a Hytasa dado el salto a la piscina grande (30 metros) que exige la División de Honor.
Más información en www.waterpolosevilla.com